Seguro que has empezado a sacar del armario las camisetas cortas, los vestidos y las bermudas. Esto es signo de que empieza el calor y todos queremos estar saludables de cara al verano. Con el tiempo bueno apetecen más comidas ligeras, frescas y refrescantes. ¿Conoces los beneficios de la "dieta mediterránea"?  todas estas cualidades las reúne nuestra dieta, que podríamos definir como un estilo de vida basado en comidas variadas, cultivos de nuestra tierra y alimentos frescos. A todas luces parece algo muy beneficioso para nuestro organismo pero, sin embargo, desde la de la Fundación para la Investigación Nutricional reconocen que la mitad de los españoles no la siguen regularmente. ¿Conoces sus alimentos y beneficios? Te lo contamos todo.

La famosa pirámide de la Dieta Mediterránea

Una alimentación equilibrada es buena para nosotros y, sobretodo, es beneficiosa para el cerebro. La Sociedad Española de Neurología constata que los alimentos que mejor sientan a nuestro cuerpo son los incluidos en la dieta Mediterránea. Así que, ¿porqué no vamos a seguirla?
La dieta mediterránea se basa en que se puede comer todo tipo de alimentos siempre y cuando respetemos la pirámide nutricional. Esta nos aconseja sobre aquellos manjares que podemos comer ocasionalmente o repetir varias veces a la semana. Además, con este criterio aportamos todas las vitaminas, minerales y demás sustancias que nuestro cuerpo necesita.


Pare ello debemos potenciar el consumo de frutas y verduras. Incluir varia veces a la semana el pescado azul, carnes blancas, arroz, pasta y frutos secos.  El vino es bueno con moderación y no debemos olvidar consumir el aceite de oliva frente a otros aceites refinados o mantequilla. Tampoco podemos odviar las proteínas, minerales y vitaminas que atesora el jamón y la paleta ibérica de Guijuelo. Además contribuye al colesterol bueno y posee un alto contenido en ácido oléico. Como el jamón de pata negra selecto de Jamonarea, de color rojo rubí, sabor inconfundible y un aroma reforzado por sus 36 mese de curación en bodegas naturales de la Sierra de Guijuelo. ¡Todo un manjar para niños y adultos, que no engorda ni eleva la tensión arterial!
Por su parte las legumbres, los cereales y la fruta proporcionan al cerebro mucha energía y los lácteos una alto aporte de calcio que favorece el aprendizaje y la memoria.

Dieta mediterránea para frenar la obesidad infantil

En estos días sin colegio los niños suelen comer más grasas y azúcares de lo normal. Además las altas temperaturas que estamos sufriendo nos conducen hacia los helados y las bebidas azucaradas, sin olvidar que los niños pasan demasiado tiempo sentados frente al televisor o un videojuego durante las vacaciones. Todo esto propicia la mala alimentación de los pequeños y la ausencia de minerales esenciales es su organismo.
La dieta mediterránea se basa en alimentos naturales y muy variados que son beneficiosos para su salud. Menos carnes grasa y más pescado, verduras y agua son necesarios para evitar futuros problemas de sobrepeso en los niños. De esta forma se habitúan a comer de forma sana y equilibrada evitando sufrir problemas cardiovasculares en el futuro.
¡Comienza hoy a ayudar a tus hijos! Prueba con platos sugerentes y postres divertidos que incluyan frutas, verduras y demás alimentos de la pirámide. Como a combinar un quiche de verduras y un sorbete de fresas de postre, o un salmorejo con un bizcocho de dátiles y pasas o puede que unas alubias con almejas y una gelatina de mango. Y no olvides ofrecer a tus hijos un buen plato o bocadillo de jamón o paleta ibérica varias veces a la semana, les incluyes una fuente de vitaminas B1, B6 y B12, vitamina C y muchos minerales.

Protege tu corazón con la Dieta Mediterránea

Gracias a este tipo de alimentación aumentarás un 10%  el colesterol tipo HDL, que es el que protege nuestro corazón y ayuda a reducir la aparición de isquemia, el infarto de miocardio y los problemas vasculares.
Seguir un patrón alimentario variado y saludable beneficia  a nuestro organismo, ayuda a controlar nuestro peso y nos proporciona una intensa sensación de bienestar, además de favorecer las acciones del riñón. No hay que olvidar el ejercicio físico, como la natación o las caminatas de verano a última hora de la tarde.

Se trata de seguir todo un modelo de vida saludable, adaptable para todas las edades y condiciones. Además son alimentos fáciles de conseguir y cómodos de preparar que pueden darnos infinidad de recetas divertidas y buenísimas. Sin olvidar que esta dieta nos proporciona un bajo consumo de grasas saturadas y azúcares y una abundancia de vitaminas y fibra que favorecen los antioxidantes. ¡Lo tenemos todo a nuestro alcance para lucir sanos y saludables!

Recetas mediterráneas, las mejores

Nos ha quedado claro los beneficios de la dieta mediterránea, podríamos patentarla como patrimonio no material de nuestra cultura porque todo son ventajas. Así que ¡vamos a seguirla!
Prueba a enriquecer tus platos con verduras, aportan color y sabor. Mezcla especias y crea tu propio pan si tienes tiempo y un poco de maña, las diferencias son espectaculares.
Mejora tus pizzas añadiendo unas verduras, tomate natural y hierbas aromáticas. Prepara tu pan casero con aceite de oliva, centeno, finas hierbas, tomate y harina de trigo. Come salmón acompañado de un sofrito con verduras y jamón ibérico, esto proporciona gran cantidad de proteínas, calcio y minerales que tu cuero necesita a la semana. Mezcla fruta natural en tus gelatinas y bebe mucha horchata, las chufas tienen un alto contenido de ácido oléico, fibra, calcio, ,magnesio, hierro y zinc. Y seguro que se te ocurren muchas más buenas ideas. Te animamos a que nos cuentes alguna en nuestro Facebook y disfruta de lo que produce nuestra tierra.

¡La dieta mediterránea es sabor, salud y cultura!